viernes, 12 de enero de 2007
Los Mochis. Nota 2
Segundo día de curso. Hoy Jorge terminó de impartir la parte del curso llamada 'Administración de PostgreSQL'. Yo inicié y terminé mi sesión de 'Mejora de desempeño de Software'.
Los alumnos del curso (de quien todavía les debo los nombres) tuvieron un mejor desempeño el día de hoy. Ayer llevábamos un retraso de aproximadamente 4 horas con respecto a la agenda programada. Hoy recuperamos ese tiempo. Supongo que ya se recuperaron del choque de usar Linux, de la prohibición de usar el mouse y de utilizar un editor de textos serio (vim).
Ayer se sintieron ofendidos cuando, a pregunta de Miguel Angel (el dueño de la empresa), contesté que los veía como un grupo 'homogéneo'. Ellos lo tomaron de la peor manera: son homogéneamente lentos, incapaces, idiotas, malos, u otro calificativo negativo que YO NUNCA MENCIONÉ. Hoy, en la comida, hicimos algunas bromas al respecto. Creo que se superó ese problemita.
A la hora de la comida (ellos comen de 13 a 15 horas y, aunque no lo crean, todos van a su casa a comer; una de las maravillas de vivir en ciudades habitables) nos invitaron a Jorge y a mí a a festejar el cumpleños de un compañero, junto con otras personas de la empresa que nos contrató, de otra empresa de software y con el novio de una de las alumnas, también programador.
Nos llevaron a un restaurante llamado Tacos Jaime. Entre los asistentes se encontraban dos chicas nuevas para mí: otras dos bellezas de Los Mochis. Una de ellas tomo algunas fotografías con su Kodak digital, las cuales prometió enviarme para ilustrar esta nota. Cuando ponga las fotos espero contar con los nombres de los asistentes.
Al terminar el curso, alrededor de la 18:00, también fuimos convidados del pastel que llevaron al festejado.
El Ing. Miguel Angel nos había hecho la invitación el día de ayer para cenar en el mejor restaurante de carnes de Los Mochis, Leñadores. Miguel Angel nos recogió en el hotel y nos llevó a un agradable lugar en donde cenamos una sabrosa carne asada llamada "Cabrería Leñador", dos cerveza cada quien (Pacífico, of course) y tuvimos una sabrosa plática acerca del desarrollo de software, lenguajes de programación, bases de datos y replicación.
Escribo esto en mi portatil, todavía llamada Isadora, usando vi, mañana lo publicaré. Son las 12:01 AM en Los Mochis. Una bella, agradable, esbelta mujer me envió un mensaje electrónico. Le quitó el sentido al último remglón de mi nota de ayer. Gracias preciosa mujer, traída de los 60s.
Los alumnos del curso (de quien todavía les debo los nombres) tuvieron un mejor desempeño el día de hoy. Ayer llevábamos un retraso de aproximadamente 4 horas con respecto a la agenda programada. Hoy recuperamos ese tiempo. Supongo que ya se recuperaron del choque de usar Linux, de la prohibición de usar el mouse y de utilizar un editor de textos serio (vim).
Ayer se sintieron ofendidos cuando, a pregunta de Miguel Angel (el dueño de la empresa), contesté que los veía como un grupo 'homogéneo'. Ellos lo tomaron de la peor manera: son homogéneamente lentos, incapaces, idiotas, malos, u otro calificativo negativo que YO NUNCA MENCIONÉ. Hoy, en la comida, hicimos algunas bromas al respecto. Creo que se superó ese problemita.
A la hora de la comida (ellos comen de 13 a 15 horas y, aunque no lo crean, todos van a su casa a comer; una de las maravillas de vivir en ciudades habitables) nos invitaron a Jorge y a mí a a festejar el cumpleños de un compañero, junto con otras personas de la empresa que nos contrató, de otra empresa de software y con el novio de una de las alumnas, también programador.
Nos llevaron a un restaurante llamado Tacos Jaime. Entre los asistentes se encontraban dos chicas nuevas para mí: otras dos bellezas de Los Mochis. Una de ellas tomo algunas fotografías con su Kodak digital, las cuales prometió enviarme para ilustrar esta nota. Cuando ponga las fotos espero contar con los nombres de los asistentes.
Al terminar el curso, alrededor de la 18:00, también fuimos convidados del pastel que llevaron al festejado.
El Ing. Miguel Angel nos había hecho la invitación el día de ayer para cenar en el mejor restaurante de carnes de Los Mochis, Leñadores. Miguel Angel nos recogió en el hotel y nos llevó a un agradable lugar en donde cenamos una sabrosa carne asada llamada "Cabrería Leñador", dos cerveza cada quien (Pacífico, of course) y tuvimos una sabrosa plática acerca del desarrollo de software, lenguajes de programación, bases de datos y replicación.
Escribo esto en mi portatil, todavía llamada Isadora, usando vi, mañana lo publicaré. Son las 12:01 AM en Los Mochis. Una bella, agradable, esbelta mujer me envió un mensaje electrónico. Le quitó el sentido al último remglón de mi nota de ayer. Gracias preciosa mujer, traída de los 60s.
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2 comentarios:
¿¡vi!? ¿¡En su primer acercamiento a *nix!? Eso es cruel.
No, no era su primer acercamiento a Linux o vi. Simplemente una parte de su cerebro se les había atrofiado por un exceso de ventanas, clicks y Office.
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